La técnica
Introducida en México por los españoles, consiste en fundir y moldear metal para crear piezas decorativas y funcionales. Ha sido clave en la elaboración de retablos, arte sacro y mobiliario en hierro forjado. Dentro de esta técnica destaca el repujado, donde se dibuja y da volumen a láminas de metal maleable, logrando diseños detallados con gran valor artístico.